Que no nos afecte la opinión de los demás

Un viejo cuento aragonés cita el hecho de que un abuelo y su nieto llevaban un burro a vender al pueblo.Iban a pié.
Pasó alguien y dijo: "qué tontos,nadie monta en el burro"
Se montó el niño y alguien preguntó: "y el pobre viejo,qué?"
Se subió el anciano y entonces alguien comentó: "qué egoista el abuelo,pobre burro!"
Y así se demuestra que nunca está todo el mundo satisfecho.
"Podemos satisfacer a algunos siempre o a todos algunas veces,pero nunca podemos dejar contento a todo el mundo y siempre"
Mantengamos hoy nuestra opinión propia.Nadie puede estar en nuestros propios zapatos y buena o mala,correcta o no,por lo menos es la nuestra y de ellos somos responsables.
No hagamos responsables a los demás de nuestras propias decisiones.

Así no nos podrán impedir nuestra propia marcha.