La tintura madre

La tintura madre es la preparación original con la cual se elaboran los elixires florales.Esta se prepara directamente en el lugar de la recolección de la planta escogida,en plena naturaleza y en un entorno protegido.
Las flores,que han de estar en todo su esplendor,se recolectan delicadamente y se colocan inmediatamente en un cuenco de vidrio transparente que contiene agua de manantial muy pura y poco mineralizada.Flotando sobre la superficie del agua,las flores ocupan toda la superficie del cuenco y se dejan al aire libre expuestas a los rayos directos del sol durante unas horas.Luego se retiran las flores que vuelven a la tierra,el líquido se filtra cuidadosamente y se introduce en un frasco lleno hasta la mitad de coñac (el alcohol hace de conservante).Se completa la preparación con una dinamización muy suave que consiste en mover el líquido durante unos minutos.Esto genera un ritmo interior que amplifica y estabiliza la tasa vibratoria de la tintura madre.
El operador ha de conocer perfectamente la planta y los factores ambientales necesarios para la realización de un elixir floral.

La tintura madre no se comercializa nunca ni se utiliza directamente,ya que sirve para la preparación del elixir floral.El elixir floral es propiamente una preparación líquida realizada con la tintura madre.
Se obtiene añadiendo unas gotas de tintura madre en un frasco que contiene una base neutra,compuesta a partes iguales de agua pura de manantial y coñac y luego dinamizando la mezcla.Esta dinamización se lleva a cabo,después de haber añadido las gotas de tintura madre,agitando delicadamente el frasco durante 30 segundos,para potenciar el elixir y estabilizar sus propiedades.La preparación que se obtiene se llama primera dilución.Por regla general,los elixires florales comercializados por los productores son preparados de primera dilución.
El elixir floral que se compra se puede volver a diluir para obtener un elixir de segunda dilucíón.
Se utilizan ambos niveles de dilución y los dos dan resultados excelente.La primera dilución se caracteriza por una efectividad y una rapidez de acción incuestionables.Se recomienda para todas las situaciones de crisis psicoemocional aguda y para facilitar que se manifiesten elementos reprimidos del pasado.Un ciclo de tomas de una primera dilución a lo largo de 4 semanas en general es suficiente para resolver este tipo de situaciones.
La segunda dilución da muy buenos resultados en los casos de una utilización más dilatada en el tiempo,para superar los hábitos y las actitudes de conducta fuertemente enraizadas desde hace muchos años y para facilitar la creación de un nuevo ámbito de conducta profundo y estable.
Es recomendado usar la primera dilución porque así se evitan las manipulaciones del producto,que amenazan con debilitar la cualidad vibratoria del remedio si no se llevan a cabo de manera correcta.
Los elixires florales a menudo se prescriben y utilizan combinados,ya que son autoadaptables y se integran muy bien entre sí.Se pueden combinar sin dificultad de 3 a 5 elixires florales en un frasco de 30 ml.y obtener entonces una fórmula personalizada que responda a las necesidades del momento.
Más de medio siglo de práctica ha demostrado que el brandy y el coñac son excelentes para conservar el mensaje sutil y las propiedades de los elixires florales.
Las personas hipersensibles al alcohol también pueden beneficiarse de los elixires florales:

• utilización directa en primera dilución a base de savia de arce,ya que ésta es capaz de recibir y conservar el mensaje esencial de las flores.La savia de arce es un conservante natural que garantiza la conservación del elixir entre 4 y 6 semanas.
• utilización en segunda dilución,éste se conservará de 3 a 4 días teniendo que renovar la preparación.