Químicamente hablando el ayuno se divide en tres etapas.
Los primeros días del ayuno están dedicados principalmente a la reorientación de tu cuerpo.Tu organismo empieza a elevar el PH del estómago,volviéndolo más alcalino.El estómago se contrae y se limpia el tracto digestivo.También es en esta fase cuando se experimenta la pérdida de peso más fuerte.
Los primeros días tendrás una fuerte eliminación de agua,minerales(especialmente potasio y sodio)y vitaminas hidrosolubles.La pérdida de proteínas al principio es de hasta 75 grs.por día,mientras que más adelante será sólo de 18 a 20 gramos.
Puede que tengas hambre,dolores de cabeza,mareos o sudores y puede que orines mucho; puede que hagas deposiciones a diario pero también que no lo hagas durante todo el tiempo.
Durante la segunda fase,el hígado empieza a autopurgarse de su carga química y tóxica,lanzando las toxinas al torrente sanguíneo para su eliminación.Podrías sentir náuseas,cansancio,tener diarrea,dolores musculares,nerviosismo,temblores....todos los síntomas de una gripe.La lengua se te ensuciará y puede que tengas mal aliento,mal olor corporal y/o erupciones cutáneas.
Basicamente tu cuerpo está combatiendo los contaminantes como si acabaras de ingerirlos.Los venenos tienen efectos dos veces: al entrar y al salir del cuerpo.Podrían ser cualquier cosa: medicamentos,conservantes,aromatizantes,pesticidas,productos empleados para cocinar o sencillamente una mala combinación de alimentos.
El proceso de curación natural a menudo supone empeorar brevemente antes de mejorar.
Durante la tercera fase comienza la purificación a fondo de los tejidos,se eliminan las toxinas de la sangre y los restos celulares y desechos son expulsados a través de los riñones.
La tercera fase combina algunos de lo síntomas de las dos primeras fases junto con explosiones de energía.Gradualmente obtendrás una sensación total de bienestar.Este es el periodo de de desintoxicación de los órganos y de regeneración.Puede que experimentes euforia o estrés,irritabilidad o una actitud mental positiva.
Ayunar es una tarea muy solitaria.Es una forma de aislacionismo involuntario.La gente intentará ponerse en tu lugar,pero querrán persuadirte para que comas.Los médicos,que entienden poco de ayunos,te cargarán con el peso pesado de su posición de autoridad para intentar crearte una mayor inseguridad sobre el ayuno y sabotear tus fuertes fundamentos.
Cuando empezaste el ayuno no te esperabas tener que lidiar con las inseguridades de otras personas,además de las tuyas.Si aguantas,te darás cuenta muy pronto de que te enfrentas a un mundo comedor.
Cuando se ayuna hay que tener firmemente arraigadas las convicciones y la seguridad en lo que estás haciendo.Por eso la motivación contituye tus raíces,que serán las que te arraiguen firmemente en el ayuno.
Tener conocimientos y una orientación te aportarán la fuerza y seguridad necesarias para evitar que vaciles ante los primeros embates de la crítica y la intimidación.
Ayunar te convierte en un observador.Es como estar en otro huso horario.Te mueves a un ritmo diferente que el resto del mundo.De hecho,puede que te encuentres con que tienes demasiado tiempo.Al fin y al cabo,comer ocupa mucho tiempo.
Hace falta ajustar algunas cosas más aparte del ajuste físico de los primeros días.
Utiliza tu tiempo de forma productiva.Obsérvate a tí mismo: fíjate en como desaparece tu apetito.En los ayunos largos,es muy importante llevar un diario porque ayuda a exteriorizar los sentimientos en lugar de simplemente guardar un recuerdo emocional de ellos.
Hay una delgada línea entre el deseo mental/emocional y el hambre físico.Observa como cambia tu comportamiento.Observa cualquier enfado o resentimiento que tengas por no poder comer.Esa es la señal que te avisa de que debes parar el ayuno.Por otra parte,una actitud positiva hacia el ayuno hace que puedas seguir adelante durante un largo periodo.
Ayunar le convierte a uno en un observador de sí mismo así como de los demás.Cuando la experiencia haya pasado,no sólo habrás cambiado,sino que además tendrás la oportunidad de de ayudar a otros para que dejen sus malos hábitos.
Las personas con enfermedades críticas,medicación continuada,disfunciones renales,enfermedad cardíaca avanzada,falta de peso o tuberculosis no deberían ayunar,aunque siempre hay excepciones.
ResponderEliminarAnte estos casos,debería ser obligatorio que algún profesional supervisase a esa persona.
La temporada ideal es cuando no haga frío,ya que al no recibir calorías el cuerpo baja de temperatura.Aún así,hay que escuchar al cuerpo y si lo haces en invierno,sólo debes procurar abrigarte muy bien,usar bolsas de agua caliente etc...
Un niño no debe ayunar porque está en fase de crecimiento,una persona adulta sí puede,lo que importa son las sintomatologías.
Si se tiene el hígado graso también se puede ayunar aunque no por largas temporadas y siempre bajo supervisión de un profesional.